DIA DE TODOS LOS SANTOS
Desde Mentalia Pamplona quisimos celebrar el día de Todos los Santos de una manera diferentes a la de otros años. Este día 1 lo celebramos con una actividad extraordinaria preparada desde el Área Ocupacional en la cual quisimos trabajar el duelo. Lo realizamos a través de una actividad la cual consistía en tres partes:
*La primera, llevada a cabo con la educadora social del centro, fueron unos cuantos residentes al rio de Oricain a recoger piedras planas y pequeñas del rio, las cuales luego lavaron y secaron.
*La segunda, llevada a cabo con la terapeuta ocupacional, esas piedritas ya limpias y secas se pintaron por l@s propios residentes. En ese momento se les explico la intencionalidad de la actividad y se les pidió que fuera lago que ell@s quisieran “enterrar” a modo de cierre o despedida, podían escribir el nombre de algún familiar fallecido, el nombre de alguna mascota o el nombre de algún amigo o amiga, se explico también que una perdida no necesariamente tiene que ir ligado a la muerte, sino que a veces en el trascurso de la vida sufrimos diferentes perdidas, de amistad por ejemplo, de libertad, de otros conceptos que también nos afectan o nos producen cierto dolor. Con lo que podía ser interesante ese cierre o despedida de manera simbólica a través de una piedra.
*La tercera y ultima parte fue llevada a cabo por la animadora sociocultural y lo que hicimos fue enterrar las piedras todas y todos en conjunto y plantar un almendro. Lo cierto es que fue una actividad en la cual hubo una considerada participación ya que había tareas que por relevos fuimos realizando, como cavar ese agujero donde cada uno puso su piedra y cada un@ se despidió a su manera, luego se tapo todo y se puso el árbol a modo de homenaje por esas perdidas que tod@s hemos tenido en algún momento de nuestras vidas. Cuando ya terminamos nos reunimos todas y todos al rededor del almendro para hablar de como nos habíamos sentido y como lo habíamos vivido, habiendo así todo tipo de comentarios a cerca de la actividad que en resumen pareció que tuvo muy buena acogida entre los y las residentes, incluso comentando que era algo necesario para mas de un@, ese sentimiento de sentir haber hecho un cierre. 
Desde el área ocupacional nos ha parecido muy positiva la experiencia ya que hemos podido abordar temas de duelo y muerte de una manera quizá mas dinámica y desenfadad siempre manteniendo respeto y mucha sensibilidad hacia la dinámica y lo que puede suponer en cuanto a sentimientos que puedan florecer, y siendo así tan buen la acogida nos sentimos muy satisfechas de haber logrado trabajar este tipo de temática con tan buen resultado terapéutico.
