UN SEGUNDO CEREBRO EN NUESTRO ESTÓMAGO (Vida saludable y salud mental)
El estómago es considerado el “segundo cerebro” del cuerpo humano, posee gran cantidad de neuronas situadas en el tubo digestivo.
Desde hace unos años, al estómago, muchos lo apodan como “el segundo cerebro”. Ese cerebro y su compleja comunidad microbiana influyen en nuestro bienestar general.
Así que los médicos tienen cada vez más claro que la función de nuestro sistema digestivo va mucho más allá de simplemente procesar la comida que ingerimos. Es más, los médicos están investigando, para el tratamiento de enfermedades mentales o del sistema inmunológico.
El cerebro y el estómago están directamente conectados a través del nervio vago (de gran importancia en el sistema digestivo, ya que coordina movimientos). Esta conexión, que une a los 500 millones de neuronas del estómago con los 100 billones de neuronas del cerebro, ocurre en ambas direcciones, por lo que si algo pasa en uno, el otro reacciona.
El impacto de la microbiota intestinal (barrera que protege al organismo de bacterias patógenas que viven en el intestino) repercute en nuestra salud, nuestra forma de pensar, de percibir la realidad y en las decisiones que tomamos.
Otra conexión entre el cerebro y el estómago que conviene tener en cuenta es que, mostramos un comportamiento más agresivo cuando tenemos el estómago vacío. Una de las razones es que la dieta es la principal fuente de triptófano, un aminoácido necesario para que el cuerpo produzca uno de los neurotransmisores que controlan las emociones a nivel cerebral, la serotonina. Y, por lo tanto, el triptófano y la serotonina disminuyen cuando no se come, incrementando la agresividad.
Vamos a compartir algunos datos sorprendentes sobre nuestro “segundo cerebro” (por Megan Rossi, especialista australiana en salud intestinal):
- Un sistema nervioso autónomo. “Tiene su propia autonomía para tomar decisiones, no necesita que el cerebro le diga qué hacer”. Este sistema se extiende por el tejido que cubre el estómago y el sistema digestivo, y tiene sus propios circuitos neuronales.
- El 70 % de las células de nuestro sistema inmune vive en el intestino. Eso hace que la salud de nuestro intestino, sea clave para nuestra inmunidad ante las enfermedades.
- El 50 % de las heces son bacterias. No son solo restos de comida: alrededor de la mitad de nuestras heces, son bacterias, muchas de ellas, son buenas y por eso los trasplantes de heces pueden ser una forma de tratamiento vital para algunos enfermos con un microbioma intestinal debilitado (cómo un trasplante de heces de otra persona en el intestino te podría salvar la vida).
- Cuanto más diversificada la dieta, más diverso el microbioma. En nuestro intestino viven trillones de microbios, a los que les gustan distintos alimentos. Estos microbios son clave para la digestión porque su actividad le permite a nuestro cuerpo absorber ciertos nutrientes de los alimentos. Por esto el microbioma intestinal mejora con una dieta diversa, asociado a una mayor salud intestinal y por lo tanto a un mayor bienestar general.
- Tu intestino está ligado a tus niveles de estrés y a tu estado de ánimo. La serotonina (neurotransmisor) afecta a muchas funciones corporales y está asociada a muchos trastornos psiquiátricos. Su concentración puede verse reducida por el estrés e influye en el estado de ánimo, la ansiedad y la felicidad.
- Si te da miedo un alimento, sentirás que te hace daño. Hay gente que cree, a veces por una “moda” pasajera, que el gluten o la lactosa les va a hacer daño, sin que tengan realmente una alergia o una intolerancia. “Creencias que pueden desencadenar problemas intestinales”.
- Tú puedes mejorar tu salud digestiva y tu microbioma intestinal. Siguiendo una dieta diversa, bajando el nivel de estrés con técnicas de relajación, evitando el alcohol, la cafeína y las comidas picantes, y tratar de dormir mejor.
Con esto, es de relevancia importancia, seguir una dieta variada, ya que ayuda a que distintos microbios prosperen con distintos alimentos y por eso el microbioma intestinal mejora con una dieta diversa y por lo tanto, mejora nuestra salud en general.
Por ello, en Mentalia, se desarrollan talleres de vida saludable, como es, el de seguir una dieta sana y variada, a través de menús adaptados y elaborados por nutricionistas y desde un control y seguimiento por parte de profesionales sanitarios (médico y enfermeros/as) y profesionales sociosanitarios (educadores sociales).
Así que cuiden lo que coman y demos un mimo extra a nuestros “cerebros”.